Prioridades pastorales de la Diócesis de Evansville
Queridos Hermanos y Hermanas en Cristo,
En el relato del llamado de los primeros discípulos en el Evangelio de Juan (1:35-42), leemos que Juan el Bautista envió a dos de sus discípulos a encontrarse con Jesús. Durante este encuentro, Jesús los invitó a ir hacia él, verlo y conocerlo. El día que pasaron con el Señor los impactó tanto que se nos dice que inmediatamente salieron y compartieron la verdad de que Jesús es el Cristo. Uno de ellos, Andrés, se lo contó a su hermano Simón y lo llevó a conocer al Señor. Simón, a su vez, comenzó su nueva vida como discípulo, recibiendo el nombre de Pedro. Andrés y Pedro un día serían elegidos para ser apóstoles, literalmente aquellos enviados a proclamar el Evangelio.
Al aceptar la invitación de Jesús, “Ven y sígueme,” el patrón de encuentro, entrar en una relación y ser enviado se repitió para cada uno de los discípulos. Desde el momento de esa invitación, fueron desafiados a explorar lo más profundo de sus corazones y a comprometerse con el gran misterio y la aventura de seguirlo a Él y convertirse en uno con Cristo. En Su Ascensión, el Señor les dio a ellos, y a todos los que los seguirían, la misión de compartir la fe y hacer discípulos, y luego en Pentecostés, Él les concedió el Espíritu Santo para empoderarnos para esta misión. Durante los últimos 2.000 años, la fe católica se ha transmitido a miles de millones de personas en todos los rincones del mundo, porque hombres y mujeres de todos los tiempos y lugares han respondido a la invitación de Cristo de seguir, aprender y luego compartir la Buena Nueva. La necesidad de tal impulso misionero es sin duda mayor en nuestros días.
Por lo tanto, en el otoño de 2023, formé un grupo de hombres y mujeres fieles, clérigos, religiosos y laicos de todas las partes de la Diócesis, para ayudar a establecer las prioridades pastorales de nuestra vida y ministerio. Durante el año siguiente, nos reunimos varias veces para un largo período de oración, estudio y diálogo, buscando discernir la dirección del Espíritu Santo en nuestra Iglesia local. Analizamos cuidadosamente las conversaciones mantenidas con sacerdotes, religiosos, fieles laicos e incluso con personas no católicas. El fruto de este intenso proceso fue la propuesta de que nuestra prioridad pastoral necesita ser el discipulado misionero, así como una recomendación sobre el método que emplearíamos para hacerlo realidad. Nuestros diversos grupos de asesores diocesanos revisaron y afirmaron este imperativo misionero de nuestra Diócesis, concretamente: Encontrarnos con Cristo de forma profunda, profundizar nuestra relación con Él y nuestra fe católica, y participar intencionalmente como testigos y discípulos misioneros en nuestra comunidad.
Durante los próximos cinco años, mientras trabajamos para implementar esta prioridad pastoral en todos los niveles —diocesano, parroquial, escolar e individual— los invito a todos a aceptar este reto con un espíritu de esperanza y alegría. El Señor Jesús sigue llamándonos por nuestro nombre a un encuentro más profundo con Él, especialmente a través de la Palabra y el Sacramento. Nos sigue invitando a pasar tiempo con Él para crecer en amor y comprensión, y así profundizar nuestro compromiso con Él y su Iglesia. También nos invita a compartir en la misión salvífica de la Iglesia saliendo a buscar a aquellos que tienen hambre y sed de la presencia de Dios en sus vidas y a compartir los frutos de nuestro encuentro y relación con Cristo. Hay una necesidad constante de reencontrarnos con el Señor y de ser fieles al impacto de ese encuentro con Él.
Lamentablemente, si bien muchos de nuestros feligreses viven bellamente la fe, los valores fundamentales y los marcadores culturales del catolicismo ya no predominan en nuestra Diócesis. Por lo tanto, se nos reta a ser más intencionales en nuestra fe: a elegir seguir al Señor a través de la vida de la Iglesia. En este sentido, la Iglesia está siempre en misión. El Papa Pablo VI anunció, “Por lo tanto, es toda la Iglesia la que recibe la misión de evangelizar, y el trabajo de cada miembro constituye algo importante para el conjunto” (Evangelii Nuntiandi, 15). Es mi deseo, como Obispo de la Diócesis de Evansville, despertar en nosotros un renovado deseo de que cada persona en nuestros 12 condados escuche el Evangelio proclamado de forma renovada. Esto implicará un trabajo de superación de preconceptos, de sanación de heridas y de testimonio de la alegría de la fe en Jesucristo.
Durante los próximos dos años, alinearemos nuestros ministerios diocesanos con estas prioridades pastorales, asegurándonos de estar unidos en nuestros esfuerzos de ayudar a las personas a encontrar, profundizar y comprometerse su relación con Cristo. Así estaremos mejor preparados para apoyar a nuestras parroquias, que sirven como centros misioneros donde nuestros feligreses están llamados a seguir al Señor en un discipulado radical. No se trata de que nuestras parroquias hagan más “cosas,” sino de enfocar sus ministerios en la labor de cultivar y nutrir discípulos. En definitiva, sin embargo, estas no pueden ser simplemente las prioridades de nuestras oficinas y parroquias. Deben convertirse en las prioridades de cada católico si queremos ser eficaces en la transformación de corazones y la generación de nuevos discípulos en Cristo.
En las próximas semanas, busquen más información sobre esta iniciativa en los boletines parroquiales, en The Message y en el sitio web diocesano y en las redes sociales. Se han distribuido carteles a las parroquias que describen las Prioridades Pastorales. Esta carta incluye un código QR en el que podrá encontrar actualizaciones.
Por favor únanse a mí en oración por el éxito de esta iniciativa para que todos en nuestra Diócesis puedan abrir sus corazones a recibir la Buena Nueva del Evangelio, así Convirtiéndonos en Uno en Cristo. Que nuestra patrona, María la Madre de Dios, interceda por nosotros y bendiga nuestros esfuerzos.
Sinceramente suyo en Cristo,
Reverendísimo Obispo Joseph M. Siegel, DD, STL
Obispo de Evansville
— Translated by Dr. Daniela Abraham, St. Meinrad Seminary and School of Theology
Oración por las prioridades Pastorales
Señor Jesucristo,
Ayúdanos a encontrarnos contigo:
a descansar en ti a través de tu Palabra y Sacramento
y a cuidarte con actos de caridad.
Profundiza nuestro conocimiento y amor por ti:
Danos sabiduría para conocer tu verdad
y asombro para apreciar tu belleza.
Envíanos a enfrentarnos al mundo con valentía
para compartir nuestra fe, tanto por nuestro bien
como por el bien de los miembros de nuestra comunidad.
Que seamos discípulos fieles
y que nuestros corazones se llenen de tu Presencia.
Que todos nos hagamos uno contigo.
Te lo pedimos por Cristo nuestro Señor. Amén.
— Translated by Bertha Melendres, Diocese of Evansville Director of Hispanic Ministry